Hay que reconocerlo, somos el mismo error que confunde LO COTIDIANO con la rutina. Por lo que a la plenitid del significar me corresponde, y a la vez por la contingencia de mi habla, me vi obligado a la redistribución del pensar habitual.
Llamemoslo ( de forma vulgar), UN QUILOMBO lo que al fin y al cabo desempeñaría el papel de un momento más cual todos pasamos. La cuestión es: ¿Sómos todos capaces de hacer un asentamiento cotidiano de la marea mental del SAMSARA (voz hindú)? ¿Es fácil poder establecer la equitación mental diaria?
littlejohn!
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